Deseo Sexual: cómo afecta la primavera

11 junio 2013 | Por ana it

Dicen que la primavera la sangre altera y revoluciona el deseo sexual. Siempre se ha asociado la estación de la primavera y del calor al aumento de la líbido. Pero, ¿es cierto? Según los expertos, durante los meses cálidos, las personas están de mejor ánimo y esto ya es un factor muy positivo a la hora de afrontar las cosas y de tener mayor predisposición.

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Dicen que la primavera la sangre altera y revoluciona el deseo sexual. Siempre se ha asociado la estación de la primavera y del calor al aumento de la líbido. Pero, ¿es cierto? Según los expertos, durante los meses cálidos, las personas están de mejor ánimo y esto ya es un factor muy positivo a la hora de afrontar las cosas y de tener mayor predisposición. La llegada del calor es sinónimo de llevar menos ropa. Sumado a ello, los días son más largos y se aumentan las horas que se pasan en la calle. El clima invita a practicar ejercicio al aire libre, lo que influye en nuestro humor aumentando la producción de endorfinas. A más ejercicio, mayor testosterona y,  por tanto, mayor deseo sexual. Son los ingredientes más que necesarios para que la líbido aumente. De todas maneras,  no hay ningún estudio científico que certifique que la primavera afecte de manera directa al deseo sexual. Sin embargo, las circunstancias, nuestro estado de ánimo, nuestro mayor tiempo en la calle y la potenciación de nuestra vida social,  sí que ayudan a que el deseo sexual aumente. Pero, a diferencia de como ocurre en la vida de algunos animales, la primavera no es determinante en nuestro deseo sexual. Por tanto, no es que haya un incremento de la líbido por ser primavera, sino que el estado de ánimo varía y con ello, la predisposición de tener una mayor vida social, de conocer gente nueva, más amoríos, consumir alimentos más frescos. Estos factores contribuyen a que cambie la química del cuerpo y a que nuestro deseo sexual aumente. Las condiciones son las propicias y pueden influir de manera directa en nuestro deseo sexual. Durante el verano,  el hecho de ir a la playa, dejar la rutina de lado, el hecho de ver los cuerpos mejor al tener menos ropa,  constituyen un estímulo que pueden provocar un mayor deseo sexual.  

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